Hoy toca una receta clásica y, aunque no es demasiado sofisticada, siempre viene bien cuando se quiere comer algo ligero. La versatilidad de este plato reside en que se puede comer tanto caliente en estos días de invierno como frío para los días de calor de verano. A por ella!
DIFICULTAD: Fácil
TIEMPO DE PREPARACIÓN: 30 minutos
INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS:
- Dos calabacines más bien grandes.
- Dos patatas medianas.
- Media cebolla.
- 200 ml. de nata líquida.
- Aceite, sal y pimienta.
- Dos hojas de laurel. Albahaca.
- Tres quesitos en porciones.
- Tres quesitos en porciones.
- Nachos y huevo cocido (opcional)
PREPARACIÓN:
- Comenzamos preparando el calabacín, la patata y la cebolla. En una cazuela echamos un chorro pequeño de aceite, lo ponemos a fuego medio y añadimos la cebolla pelada y partida en trozos no muy grandes. Hacemos lo propio con la patata y la echamos a la cazuela. Recordad que para partir la patata lo mejor es hacer un corte con el cuchillo y chascarla para sacarle todo el almidón. Por último añadimos el calabacín en trozos. Se puede utilizar el calabacín entero o pelado. La piel del calabacín da un sabor algo más fuerte y, sobre todo, un color verde intenso bastante bonito. Personalmente prefiero hacerlo sin piel (la crema queda más blanca) pero eso, como casi todo, a gustos. Añadimos sal, pimienta y las especias que más os gusten. En este caso, yo utilicé tomillo y albahaca. Rehogamos un par de minutos las verduras.
- Añadimos dos hojitas de laurel y echamos agua sin llegar a cubrir del todo los ingredientes. Hay que tener en cuenta que el calabacín es una verdura que tiene mucha agua y al cocerla va a soltar bastante, por lo que si cubrimos por completo con agua es probable que luego nos quede demasiado caldoso.
- Lo ponemos a fuego alto y cocemos durante aproximadamente 7-8 minutos. Visitad este truco para saber cuándo tendremos el punto exacto de cocción, ya que dependerá de lo grande que hayáis partido las patatas.
- En cuanto esté cocido, retiramos el laurel y añadimos la nata líquida y los quesitos. Cogemos la batidora y batimos bien todos los ingredientes. Probamos de sal y corregimos si hiciera falta. Si la crema nos hubiera quedado demasiado espesa, añadimos un poquito de leche hasta tener la consistencia que queramos. Servimos en un plato y a comer!
Como ya dije, esta receta se puede comer tanto fría como caliente, según la época del año. Como sugerencia de presentación, se puede esparcir por encima un poco de albahaca o perejil para dar algo de color al plato. Lo clásico es añadirle también unos picatostes, aunque yo a veces añado unos nachos, que siempre dan su toque crujiente y diferente. En este caso, añadí también un huevo cocido, que le da un punto espectacular. Que aproveche!!
Ya sabéis, si os gusta la receta o tenéis alguna sugerencia, dejadme un comentario. Gracias! ;)
Apunto esta opción!!
ResponderEliminarY aprovecho que tu la haces sin piel, para compartir la versión con piel
http://elosohambriento.16mb.com/crema-de-calabacin/
Un saludo
Muchas gracias por seguir visitando el blog!! No había llegado a ver tu receta de crema de calabacín...pero habrá que probarla también!!
ResponderEliminarUn saludo!!
Otro día probaré tu receta, me gusta.
ResponderEliminarBesaZos.
Gracias, me dices qué tal cuando la pruebes!!
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