Atentos a esta receta, no os dejéis engañar por un nombre poco espectacular, porque se trata de un postre fuera de categoría y, además, bastante fácil, con el que seguro que sorprenderéis a más de uno. La receta es de mi hermana Isabel, y es, sin duda, uno de nuestros postres favoritos. Se trata de zumo de piña con queso mascarpone, increíble. El mascarpone es un queso del norte de Italia muy cremoso y que ha de comerse fresco. Aunque sea queso fresco es altamente calórico así que mejor no utilizar mucho esta receta si estamos intentando adelgazar, mejor dejarla sólo para las grandes ocasiones... ;) Vamos allá!
DIFICULTAD: Fácil.
TIEMPO DE PREPARACIÓN: 20 minutos.
TIEMPO DE NEVERA: Al menos una hora.
INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS:
- 800 ml de zumo de piña sin azúcares añadidos.
- 375 gramos de queso Mascarpone.
- 4 yemas de huevo.
- 150 gramos de azúcar.
PREPARACIÓN:
- En algún recipiente grande echamos el azúcar. Separamos las yemas de los huevos de las claras y las echamos junto al azúcar. Batimos bien hasta que se blanqueen y quede una pasta homogénea. Para separar las claras de las yemas basta con cascar el huevo a la mitad como si fuéramos a freírlo y pasar la yema de un trozo de la cáscara al otro un par de veces o tres, dejando que la clara rebose por los lados y caiga. Es más difícil explicarlo que hacerlo!!
- Añadimos poco a poco el queso Mascarpone y con ayuda de una varilla vamos removiendo para que la mezcla quede lisa y cremosa, sin ningún grumo.
- En una copa echamos una buena cantidad de zumo de piña y la recubrimos posteriormente con una capa de la mezcla de queso Mascarpone. Como la mezcla es menos densa que el zumo, el queso se va a quedar en la superficie, dando un aspecto muy original, parecido al de una cerveza con espuma. Una vez servido, lo metemos a la nevera hasta el momento de servir (procurad que al menos esté una hora en la nevera).
- Cuando llegue la hora del postre, lo sacamos de la nevera... y a disfrutar! Es importante que el zumo de piña sea sin azúcares añadidos porque el sabor a piña es más natural, más intenso. Si queréis darle un toque de color a la receta, podéis presentarlo rayando un poquito de chocolate en la superficie al momento de servirlo. A la hora de comerlo, cada comensal puede decidir si mezclar bien los ingredientes para que quede una crema bastante líquida o comerlo tal cual está, a gusto de cada uno. Si queréis hacerlo un poquito más sofisticado podéis utilizar piña natural y hacer zumo de piña con ayuda de una licuadora, pasándolo todo después por un colador fino para eliminar las hebras, y reservando alguna rodaja de piña para decorar. Que aproveche!!
Ya sabéis, si os gusta la receta o tenéis alguna sugerencia, dejadme un comentario. Gracias! ;)
Maravilloso Carlos!!
ResponderEliminarLa presentación en mi caso fue nefasta. Todos los asistentes (los 25 asistentes) se decantaron por los bollos y tartas cremosas y merengosas. Tímidamente se acercaron a degustar la esencia de éste, tu postre. Y hasta ahí puedo leer... pocas veces he recibido tantos piropos!!! ni de miss ;-D
Un besazo pa ambos dos
¡Qué gusto da recibir comentarios como éste! Muchísimas gracias mi querida miss! ;)
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